Ya desde pequeña me apasionaban la publicidad y el marketing, ¡y ni siquiera sabía lo que eran! Cada vez que en la tele veía un anuncio que me interesaba, llamaba a mi padre y le hacía explicarme qué entendía él del anuncio. Era increíble las veces que no pensábamos lo mismo.
Mi futuro lo tenía claro: trabajar en marketing para la empresa. Durante la carrera de Publicidad y Relaciones Públicas nos enseñaron cómo se trabaja en una agencia, pero nunca me interesó. Me parece mucho más desafiante convertir en Marketing todo lo que la empresa crea y desarrolla.
No puedo evitar las mariposas en el estómago cuando viene un cliente potencial y me comenta su idea de proyecto. Mi mente empieza a generar conceptos, acciones, conexiones.. la parte emocional se pone en marcha.
De cada diferencia podemos hacer un nicho, nuestro hueco especial en el mercado. Y ahí entramos con toda nuestra creatividad y experiencia. Todo producto es valioso y necesario para el cliente, solo hay que encontrar la mejor manera de acercárselo.
Una de mis pasiones es viajar y, por supuesto, también lo he llevado al plano laboral. Desde países europeos como Italia, la región balcánica o Rusia, pasando por países árabes hasta América la expeirencia es maravillosa.
Tengo la suerte de poder trabajar en sectores tan apasionantes como la hostelería, la moda, la farmacia o el asociacionismo. Y todos los que vendrán. ¿Empezamos a trabajar?
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